El "Diccionario cheli" de Francisco Umbral es una obra única que se presenta como un profundo y detallado análisis del argot cheli, una jerga que emergió en los años de la Transición española entre los jóvenes de Madrid. Este libro, publicado por la editorial Grijalbo en 1983 como parte de la colección 'Narrativa 80', no solo desentraña el significado de estas palabras y expresiones, sino que también ofrece un incisivo estudio sociológico de los usuarios de este lenguaje.
En sus 255 páginas, Umbral se adentra en el mundo de los "náufragos del desarrollo", como él mismo los denomina, quienes utilizan este lenguaje como una herramienta de autoidentificación y distanciamiento social. A través de su obra, el autor no solo se limita a describir un conjunto de términos, sino que también explora las dinámicas culturales y sociales que subyacen a su uso, revelando así las complejidades de una generación que busca redefinir su lugar en una sociedad cambiante.
La presentación del libro, que tuvo lugar en el Palacio del Conde-Duque de Madrid, fue un evento emblemático del espíritu madrileñista que caracteriza tanto al autor como al contexto de su obra. Con la presencia del alcalde de Madrid, Enrique Tierno Galván, quien destacó la capacidad del cheli para funcionar como un elemento distanciador y de autoafirmación, la obra fue recibida con entusiasmo por un público ávido de entender esta peculiar forma de comunicación.
Umbral, reconocido cronista de la vida madrileña, consigue en este diccionario no solo capturar la esencia de un lenguaje en evolución, sino también reflejar el entorno social de una época. A través de ejemplos vividos, como el acento madrileño sobre la vocal tónica, Umbral invita al lector a sumergirse en un mundo lingüístico vibrante, que va más allá de las palabras para convertirse en un testimonio cultural de gran valor.
El "Diccionario cheli" se erige así como una obra indispensable para aquellos interesados en la lengua española, las jergas urbanas y la historia social de Madrid. A pesar de ser un libro de segunda mano, con posibles marcas de antiguos propietarios, su contenido sigue siendo relevante y fascinante, ofreciendo una ventana única al Madrid de los años ochenta y su juventud en busca de identidad.