En "El 19 de marzo y el 2 de mayo", Benito Pérez Galdós nos sumerge en los tumultuosos eventos que rodearon la caída de Manuel Godoy y el ascenso al trono de Fernando VII a través de los ojos de Gabriel, un joven cajista en la imprenta del Diario de Madrid. Ambientada en la España de 1808, esta obra es un vívido retrato de las intrigas políticas y las convulsiones sociales de la época.
La novela comienza con Gabriel visitando regularmente a su novia Inés en Aranjuez, donde reside con su tío, el sacerdote don Celestino, un aliado de Godoy. A medida que las tensiones políticas se intensifican, Gabriel se encuentra en medio del creciente descontento popular contra Godoy, quien es visto como un favorito corrupto de los franceses. La situación llega a un punto crítico cuando los hermanos Requejo llegan con intenciones de tomar a Inés bajo su custodia, complicando aún más la vida de Gabriel.
El clímax de la primera parte del libro se alcanza con el Motín de Aranjuez, que estalla entre el 17 y el 19 de marzo. Gabriel, incapaz de volver a Madrid y atrapado en los eventos, presencia el asalto a la casa de Godoy y su posterior detención. Las calles de Aranjuez se convierten en un hervidero de revuelta y violencia, con Gabriel y don Celestino en el corazón de la acción. La caída de Godoy marca un cambio decisivo, culminando con la abdicación de Carlos IV y la proclamación de Fernando VII como rey.
La segunda parte del libro nos lleva a los eventos del 2 y 3 de mayo en Madrid, donde Gabriel regresa y se ve envuelto en la resistencia contra las fuerzas francesas que han ocupado la ciudad. Estos capítulos destacan la brutalidad del enfrentamiento y la heroica, aunque trágica, resistencia de los madrileños. A través de los ojos de Gabriel, Galdós no solo recrea estos eventos históricos con gran detalle, sino que también examina sus profundas repercusiones personales y nacionales.
"El 19 de marzo y el 2 de mayo" es una obra que combina con maestría la narrativa personal con la historia colectiva, mostrando cómo los grandes eventos históricos son vividos y sentidos por individuos concretos. Galdós, con su característico realismo y profundidad psicológica, ofrece una ventana única a uno de los períodos más convulsos de la historia española.
