"Fulgor y muerte de Joaquín Murieta", única obra teatral escrita por el laureado poeta chileno Pablo Neruda y publicada en 1967, nos sumerge en la apasionante y trágica historia de un inmigrante chileno convertido en legendario justiciero. Ambientada en la época de la fiebre del oro en California, esta obra es un vibrante relato que combina drama, humor y crítica social, musicalizada por Sergio Ortega y estrenada en 1988. La obra reivindica la existencia de Murieta, desafiando la teoría de que las leyendas sobre él eran amalgamas de varios líderes de bandas.
La trama se despliega en un formato de cantata u oratorio con tintes de melodrama, ópera y pantomima. Comienza con el éxodo de desheredados chilenos hacia California, atraídos por la promesa del oro. Entre ellos se encuentra Joaquín Murieta, quien durante la travesía hacia el norte americano, encuentra el amor en Teresa. Sin embargo, estos personajes nunca aparecen físicamente en escena; sus presencias se evocan a través de voces y sombras, enriqueciendo el misterio y el simbolismo que los envuelve.
Al llegar a San Francisco, la hostilidad contra los extranjeros y en particular contra los chilenos y mexicanos se intensifica. Los Galgos, un grupo encabezado por Un Caballero Tramposo, que personifica al Tío Sam, perpetran actos de violencia racial. En uno de estos brutales actos, Teresa es asesinada, lo que impulsa a Murieta a jurar venganza. Transformado por el dolor y la injusticia, Murieta se convierte en un bandido vengador, dedicando su vida a proteger a los oprimidos y a castigar a los opresores.
La obra de Neruda, con su profundo patetismo entremezclado con momentos grotescos, no solo cuenta la historia de un hombre, sino que también critica la discriminación y la brutalidad. "Fulgor y muerte de Joaquín Murieta" es una pieza que, aunque escrita con un tono en parte jocoso, aborda temas profundos y dolorosos, reflejando la lucha continua entre la justicia y la opresión, el amor y la pérdida.